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El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se reunió el 19 de junio en China con el presidente, Xi Jinping, para conversar sobre las relaciones tensas entre ambos países. En la sesión, hizo un llamado a que haya una relación «responsable» para que los desacuerdos no se conviertan en «conflictos».

Uno de los temas a los que hizo referencia fue Taiwán, al plantear las preocupaciones de Estados Unidos sobre las acciones chinas en este territorio. Aclaró que su país no apoya la independencia de los taiwaneses, pero sí espera que haya una solución pacífica ante el reclamo histórico que China tiene sobre ellos.

Otro de los puntos que Blinken tocó fue el de los derechos humanos. Se refirió específicamente a los casos de violaciones de derechos fundamentales que han ocurrido en Xinjiang, el Tibet y Hong Kong. También señaló que ha habido «detenciones injustas» de ciudadanos estadounidenses en China.

El secretario aseguró que Estados Unidos está listo para cooperar con China en temas de interés mutuo. Entre esos posibles puntos, mencionó el cambio climático, la estabilidad macroeconómica, la salud pública, la seguridad alimentaria y la lucha contra las drogas.

Por su parte, Xi Jinping le indicó que espera que tras esta visita «haga contribuciones más positivas» a la relación entre los dos países. Incluso, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Qin Gang, había mantenido conversaciones «francas» y «directas» con Blinken sobre sus respectivos intereses, según lo comunicado por el Departamento de Estado.

Desde 2018, Blinken ha sido el primer funcionario estadounidense que visitó Beijing. Su viaje estaba pautado para febrero de 2023, pero debido a la presunta actividad de un globo espía de China en Estados Unidos, las tensiones entre los dos aumentaron y el viaje fue suspendido. Tras la visita del secretario, se espera que Gang visite el país norteamericano próximamente, como parte de los acuerdos a los que se llegó en las reuniones de los últimos días.