Tomada de The Clinic

El oficialismo chileno perdió en elecciones dos de sus territorios más importantes: la alcaldía de Santiago Centro y la alcaldía de Nuñoa. Sin embargo, logró mantener liderazgos en Maipú, una comuna en la periferia de la capital, Viña del Mar y Valparaíso, donde ganó por primera vez una mujer.

Con un 87,3% de los votos verificados, se conoce que el oficialismo mantuvo 110 alcaldías y perdió 40, entre las que figura Santiago Centro, que ahora está bajo la jurisdicción de la derecha tradicional representada por el liderazgo de Mario Desbordes -quien fue ministro de Sebastián Piñera; y Nuñoa, ahora en las manos del también exministro Sebastián Sichel.

Los sondeos ya asomaban el triunfo de la derecha, con mejores resultados que hace cuatro años, pasando de 87 alcaldes a 123, en unas elecciones que también renovaron gobernadores y consejeros en las 16 regiones del país.

Entretanto, el presidente chileno, Gabriel Boric, dijo que ninguna fuerza política «puede atribuirse triunfos arrolladores» en los comicios municipales y regionales. «Los pronósticos catastrofistas de un lado y otro no se han cumplido, tenemos un país diverso y tenemos el deber de convivir mejor entre nosotros». Y añadió: «hemos visto resultados en los últimos cinco años que han favorecido por mucho a un sector, después por mucho a otro y, hoy día, se vuelven a equilibrar. ¿Cuál es la enseñanza que nos deja esto? Que no es posible construir un país si no respetamos a quien discrepa de nuestras ideas».