Polítika UCAB

Pese a estar a un voto de ser inhabilitado políticamente, el expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, confía en remontar su situación ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE). Aún quedan tres jueces por votar y si uno de ellos lo hace a favor de su inhabilitación, quedará suspendido y no podrá optar a ejercer funciones públicas para los próximos ocho años.

«La partida aún no ha terminado», dijo Bolsonaro en Río de Janeiro cuando fue consultado por el proceso en el que está envuelto. El TSE está dirimiendo sobre su responsabilidad en delitos de abuso de poder y uso fraudulento de recursos del Estado.

En 2022, antes de perder las elecciones presidenciales contra Lula da Silva, reunió a 70 embajadores y diplomáticos en el Palacio de Planalto e intentó persuadirlos de las presuntas fallas del sistema electoral brasileño. En su discurso criticó, sin pruebas, el funcionamiento y la seguridad de las urnas electrónicas.

Los jueces que han votado a favor de la inhabilitación de Bolsonaro son Benedito Gonçalves, Floriano de Azevedo Marques y André Ramos Tavares. Si alguno de los juristas que votará el 30 de junio decide suspender la sesión, el proceso se alargará por 30 días, con la opción de otros 30 días de prórroga. Además, al tener en cuenta el receso de julio, daría un total de 90 días la extensión del juicio.

Por su parte, Bolsonaro espera revertir la situación y participar en los próximos comicios de Brasil. De acuerdo al calendario electoral, en 2024 habrá elecciones municipales y en 2026 las elecciones generales en las que podría optar a la presidencia si no queda inhabilitado.