Tomada de AFP/Getty Images

Los Estados miembro de la Unión Europea acordaron extender un año más las sanciones que pesan contra el Gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua por la creciente represión, especialmente por el deterioro democrático y los abusos sistemáticos de derechos registrados tras las protestas del 2018.

Las sanciones afectarán a 21 personas y tres entidades, entre las que se encuentran la ‘copresidenta’ de Nicaragua, Rosario Murillo, el círculo más próximo a la pareja incluyendo sus hijos, familiares y asesores. En la lista hay mandos policiales, a los que se responsabiliza de represión a la sociedad civil y a la oposición mediante el uso excesivo de la fuerza, detenciones y torturas.

Los sancionados no podrán viajar a la Unión Europea y sus activos en el bloque serán congelados. En este sentido, queda prohibido que empresas o personas pongan fondos a su disposición en la UE.

Con estas acciones, el bloque pide que se liberen a los presos políticos,  que se restablezcan las libertades fundamentales en Nicaragua y  se permita el regreso de las organizaciones internacionales de Derechos Humanos.