Héctor Antolínez

De acuerdo con la opinión de expertos existen muchos factores que han influido para tener la amplia oferta de nombres que hoy existen para la primaria. Sin embargo, concuerdan que para el momento cumbre lo más probable es que se reduzcan a unos cuatro o cinco nada más

Si hay algo que ha caracterizado a la primaria que la Plataforma Unitaria está organizando,  ha sido el amplio espectro de candidatos que hoy en día han lanzado su nombre al ruedo como aspirantes a la Presidencia de la República.

Para el momento de la escritura de este texto al menos 13 nombres han manifestado públicamente su participación en la primaria: Tamara Adrián, César Almeida, Andrés Caleca, Henrique Capriles, Roberto Enríquez, Luis Farías, María Corina Machado, César Pérez Vivas, Carlos Prosperi, Benjamín Rausseo, Delsa Solórzano, Freddy Superlano y Andrés Velásquez.

Se trata de una lista tan amplia y diversa como el estado actual de la oposición venezolana. Es además una lista que pudiera sumar inclusive más nombres que han “sonado” pero que no se han confirmado, como algún candidato de Fuerza Vecinal, y el actual gobernador del Zulia, Manuel Rosales.

¿Los motivos? Son muchos, el politólogo Enderson Sequera menciona entre algunos de estos los altos incentivos en caso de una victoria, el atractivo económico de ser un candidato, y la posibilidad de alianzas. Por su parte, el también politólogo Fernando Spiritto nombró las ambiciones políticas frustradas en medio de un contexto político que no ha cambiado en 22 años, y la imposibilidad de lograr un consenso.

Independientemente de los factores, ambos coinciden en una lectura: la cantidad actual de candidatos no será la que se tenga el 22 de octubre, fecha de la elección primaria.

Spiritto aseguró que “lo más probable es que el número de candidatos se reduzca a medida que aparezcan filtros para inscribirse formalmente”, y destacó el gasto de capital económico y político como uno de los motivos de esto.

“Las razones son sencillas, hay un gasto financiero, las campañas son muy costosas, otra cosa es el bajo apoyo popular, hay candidatos que lo hacen muy bien, otros que lo hacen muy mal y eso se refleja en las encuestas. El número de candidatos punteros son dos o tres, máximo”, comentó.

Por su parte, Sequera dijo que la reducción de nombres de aspirantes será algo normal pues “es el proceso natural de toda selección”, y añadió que “presentar tu nombre no significa que vayas a correr toda la carrera”.

“Los 4 candidatos con mayor posibilidad de triunfo en las primarias de octubre son: María Corina Machado, Benjamín Rausseo, Henrique Capriles y Manuel Rosales (aunque su postulación aún no es oficial). Mientras más nos acerquemos a la fecha de la elección, el cuadro de candidatos se acercará más a esta fotografía final y menos a la fotografía de decenas de candidatos que tenemos hoy”, señaló Sequera.

¿Qué pasa si el número no se reduce?

Un escenario improbable aunque posible, es que el número no se reduzca, lo cual según Spiritto obviamente significaría una división de los votos entre todos los candidatos.

“Es una posibilidad lógica, que el voto se divida entre muchos candidatos y por lo tanto el ganador sea uno con bajo apoyo del electorado”, explicó aunque añadió que a su juicio lo más probable es que la gente “vote a ganador”, es decir que le dé su voto a quién aprecie que tiene más posibilidades reales de ganar.

El prospecto de tener un ganador con un 15 o 20% de los votos pudiera ser un problema, aunque Spiritto señaló que no sería un escenario tan grave si la participación de votantes fuera amplia. Comentó que el problema “podría estar en otro lado”.

“El peor escenario no es que la votación se divida, es que la votación sea muy baja. En estos momentos veo a la gente muy desencantada y lo más seguro es que una buena parte de los votantes no se movilice ese día. Ese sería un escenario peor”, expresó.

Por su parte, Sequera reconoció que el riesgo de que se pueda dividir la votación es algo que siempre existió desde la concepción de la primaria, el riesgo de que no se imponga la mayoría sino “la minoría más organizada”.

“Por eso, en su momento, se plantearon distintos mecanismos de votación a la Comisión Nacional de Primaria, como el sistema de preferencias. La idea era promover la temprana conformación de alianzas, disminuir la campaña negativa y, en esencia, aumentar la representatividad del ganador de la contienda. La comisión decidió al final por el sistema de mayoría simple”, explicó Sequera.

En su opinión, el riesgo de dividir el voto sigue siendo “bajo” ya que “el cuadro sigue siendo el mismo: cuatro candidatos con posibilidades de triunfo”. En ese sentido consideró lo más plausible que sean los candidatos que no tienen posibilidades reales de ganar los que empiecen a declinar para apoyar a los que sí.

“¿Disminuirá el número de candidatos? A medida que avancen la conformación de alianzas es más probable. Tendría que imponerse la insensatez e inmadurez política de algunos actores que, aún sin posibilidades de triunfo, decidan hacer la carrera hasta el final. De suceder esto, aumentaría la posibilidad de que se imponga la minoría más organizada y no un candidato que encarne el sentimiento mayoritario del país. La pelota está en manos de los candidatos que no tienen posibilidad de ganar”, sentenció.