
Tomada de Reuters
Tras el intento de golpe suscitado en Bolivia contra la presidencia de Luis Arce, el mandatario negó las acusaciones del excomandante Juan José Zúñiga, quien afirmó que el atentado se trataba de un autogolpe de Estado.
Las acusaciones realizadas por Zúñiga al momento de ser detenido son señaladas por Arce como un sinsentido, ya que su Gobierno nunca recibió alertas «de lo que él pretendía, menos de las movilizaciones que realizó”, y dice que es “todo lo contrario”, han “quedado sorprendidos», según indicó durante una conferencia de prensa oficial.
«Hay cosas que se vienen diciendo sobre las declaraciones del excomandante del Ejército Zúñiga, que merecen un mayor análisis. Yo veo que se trata de enfatizar en una cosa cuando hay varias cosas que él ha dicho. Evidentemente, muchas son contradictorias», indicó Arce, mientras señaló que las acciones del excomandante desmienten lo dicho durante su detención.
Arce destaca que el intento de golpe fue en desacato a las indicaciones que él, como jefe de Estado, dio al excomandante Zúñiga. «Cuando yo le increpo aquí y le instruyo en la puerta del palacio que desmovilice las tropas, él me responde que ‘no va a acatar mis instrucciones’ (…) Él estaba desacatando, estaba incumpliendo órdenes. No acata porque él actuó por cuenta propia», subrayó.
Hasta el momento, el presidente boliviano confirmó la detención de 17 militares involucrados, pero se cree que la cantidad de implicados es mayor. Arce sostiene que «hay mucha gente en el ejército que ocultó información, que no reportó la información correcta (…) No llegó la información, se estaba evitando que llegara información hacia el Ministerio de Defensa y el Gobierno Nacional».



















