
Tomada de Telemundo
Tras los aranceles del 25% impuestos a las importaciones de acero y aluminio, el Gobierno brasileño priorizará las negociaciones antes que las represalias. La medida estadounidense podría desfavorecer al país en pérdidas de hasta 1.500 millones de dólares que afectarían principalmente a los productos semiacabados, aunque las pérdidas tendrían un menor impacto en el Producto Interno Bruto (PIB) y las exportaciones totales de Brasil.
El Gobierno brasileño evaluará recurrir a la Organización Mundial del Comercio (OMC), que se ocupa de las normas mundiales por las que se rige el comercio entre las naciones. La organización está integrada por 166 países, incluyendo Brasil y Estados Unidos.
En una nota publicada por los Ministerios de Relaciones Exteriores y de Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios, Brasil lamentó las medidas que «tendrán un impacto significativo en las exportaciones brasileñas de acero y aluminio a EE. UU., que en 2024 ascendieron a unos 3.200 millones de dólares». En este sentido, consideraron la imposición de estas barreras como una medida «injustificable e incorrecta».
Destacan la cooperación mutua e integración económica citando datos estadounidenses que revelan el historial de beneficio de las relaciones económicas con Brasil. «Estados Unidos mantiene un superávit comercial de larga data con Brasil, que en 2024 fue del orden de los 7.000 millones de dólares estadounidenses, solo en bienes».





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