
Polítika UCAB
Según el último informe del centro de pensamiento Wilson Center, en Washington, gran parte de los cinco millones de venezolanos dispersos en el mundo, no tienen acceso seguro a la vacuna contra el COVID-19. El documento contempla que la situación responde a que los países receptores excluyen de sus planes a los inmigrantes indocumentados.
El estudio advirtió que países como Colombia, Perú, Chile, Ecuador y Brasil, solo están vacunando a inmigrantes regularizados, mientras Argentina, en teoría los incluye, pero no son considerados como grupos prioritarios.
Colombia es el país con más población venezolana, y donde las vacunas contra COVID-19, solo se aplican a los inmigrantes regulares y afiliados al sistema nacional de salud.
La investigadora de la Universidad Johns Hopkins y coautora del informe, Jacqueline Mazza, denunció que “no se está usando un criterio de salud para acceder a la vacuna en población vulnerable”. Asimismo cuestionó que se imponga como requisito,“ser residente regular para recibir la dosis”.
Expertos consultados por la Voz de América aseguran que a pesar de que los planes de vacunación son independientes en cada país, la vulnerabilidad de la población migrante y la negación ante las vacunas, “podría demorar el control de la pandemia en Latinoamérica”.
La realidad es que en Venezuela tampoco hay un acceso a la vacuna contra el COVID-19, el gobierno no ha asegurado ningún plan de inmunización nacional, pese al anunció de la adquisición de vacunas a través del mecanismo COVAX, el pasado mes de abril.