Se veía venir. Desde mucho antes de las primarias las dificultades de un consenso en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ya estaban presentes, al menos, para escoger los candidatos a las parlamentarias 2015. Algunos partidos, incluyendo parte de la ciudadanía, reclamaron las primarias totales, pero la decisión final fue que aun dándose las elecciones internas, el consenso también iba.
Los reclamos y diferencias -aún vigentes- vienen dados por el método a usar para el consenso, pues en procesos anteriores generó las mismas rencillas que pusieron a prueba el concepto unitario de la MUD. Se trata de tomar como referencia los resultados electorales, y he allí el problema, cuáles comicios a utilizar como referencia.
Para las elecciones de diputados al Consejo Legislativo y las de la Cámara Municipal, el consenso se basó en las parlamentarias de 2010; sin embargo, de acuerdo con el reglamento aprobado por la MUD para este nuevo proceso se usará como base los resultados de los votos lista en las regionales de 2012, decidiendo los partidos que acumulen entre ellos el 70% o más de votos.
Es así como a Primero Justicia (MPJ) y La Causa Radical (LCR) les corresponden el primer y segundo puesto en la lista, respectivamente. Según las votaciones obtenidas, a estos partidos les corresponde a su vez una segunda plaza en la maqueta de candidatos, seguido de AD con dos puestos, y un lugar para MIN Unidad y VPA.
Las querellas
El anuncio de los candidatos por consenso debería darse entre este viernes y el sábado, habiéndose estipulado un lapso de 72 horas para culminar las reuniones. Pero estas en el estado Bolívar solo intensificaron las querellas entre los partidos como Primero Justicia y La Causa R, cuyas diferencias y viejas heridas se ahondaron mucho más luego de los resultados de las primarias.
Según el Centro de Estudios Políticos de la UCAB, la intención de voto se concentra mayoritariamente en la oposición.
Con el primer puesto en la lista como garantía, Primero Justica, al conocer el resultado favorecedor a Voluntad Popular en el circuito 2, reclaman ahora su cuota en el municipio Caroní. Incluso, se llegó a rumorar que su abanderado en las elecciones internas, Raúl Yusef, fue propuesto para la terna del consenso. Esa solicitud hasta ahora fue descartada, pese a las “exigencias” que han hecho a la MUD los representantes de partidos políticos y el voluntariado que apoyó su candidatura.
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Crece intención del voto
Una investigación nacional sobre percepciones del electorado, realizado por el Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), revela que el 87% de los venezolanos afirman que “pase lo que pase irá a votar en las elecciones parlamentarias”, mientras que un 85% expresa que “llegamos aquí con el voto y saldremos de aquí con el voto”, a pesar de la alta desconfianza en el Consejo Nacional Electoral (CNE), porcentaje que alcanza el 64%.
El estudio muestra a su vez que el sector opositor lidera la intención de votos con 39.2 %; con 20,7% se ubican los indecisos; 16.4% no votaría por ninguno de los dos polos; 15.5% votarían por los candidatos del PSUV y 8.2% no votaría.
Primero Justicia justifica su reclamo pretendiendo cobrar el puesto que le correspondía a Voluntad Popular con el triunfo en las primarias de Francisco Sucre. Igual sucede con La Causa R y AD, ambos con la oportunidad de dos plazas, pero contando también con candidatos electos en primarias.
Los de la ‘erre invertida’, aunque les corresponde el segundo puesto en la lista, no aceptaron esa postulación por mantenerse fieles a su exigencia de primarias para todas las candidaturas. Sin embargo, la eliminación de las elecciones al Parlatino cambió el panorama para la elaboración de la maqueta de la MUD, donde el partido no ha renunciado definitivamente a su inclusión en el consenso. La incógnita que persiste es el nombre del actual diputado de la Asamblea Nacional Andrés Velásquez para reelección: si ganará la pelea por el primer puesto o se preparará una vez más para la Gobernación de Bolívar.
Posibles cuadros
Hasta ahora los cuados que se manejan en el municipio Caroní es la candidatura de Freddy Valera por AD, Wilson Castro, de Primero Justicia en el voto lista, y Olivia Lozano de Voluntad Popular, aunque esta última -según versiones extraoficiales- no tiene segura su inclusión por las exigencias y solicitudes de cambio de última hora por parte de otros partidos. Al humo negro que persiste en la coalición se le suma el rumor sobre la intención de postular en el estado a un dirigente nacional de la juventud.
Hay que destacar que el reglamento de la MUD para la designación por consenso establece que no pueden ser candidatos quienes estén en otro cargo de elección popular, cuyo período no haya culminado para el 4 de enero de 2016.
Lo cierto hasta el momento es que las diferencias internas en el seno de la disidencia han sido la hiel de no pocos desencuentros. La propia idea de una plancha unitaria se perfila ahora como nudo gordiano antes querellas viejas y de ahora, que complica no solo la posibilidad de un verdadero consenso, sino la convicción necesaria para sumar esfuerzos y procurar la victoria del conjunto.
A la cadena de desavenencias se suman otras dos: la erosión de la credibilidad de la MUD ante la ciudadanía, que ante un panorama de conflictividad interna solo le queda abstenerse de votar por una opción que no se muestra como alternativa al chavismo, sino como una opción que naufraga en la discordia.
Como punto final, y de alerta para la oposición, es que esa orfandad de credibilidad y de representación ciudadana puede traducirse, a su vez, en la conformación de planchas paralelas de la oposición, que surjan como respuesta a la crisis de representatividad de los bolivarenses que aspiran a un cambio político, pero no encuentran en la palestra un liderazgo que amalgame sus intereses y que capitalice la mayoritaria intención voto contra el gobierno. La historia juzgará los resultados.
Extraído de: Correo del Caroní
Categorías:Opinión y análisis