
Polítika UCAB
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, abrió la primera reunión del equipo especial que creó la institución para responder ante la crisis que ha generado el conflicto entre Rusia y Ucrania. En la sesión inicial, profundizó en el impacto que está teniendo la guerra en el mercado energético y de alimentos.
«Ningún país podrá aislarse de un derrumbe del sistema económico global», sentenció Guterres al tiempo que afirmó que habría un «efecto dominó» por el acaparamiento de los alimentos o del combustible y un impacto a largo plazo en el incremento de la pobreza y el hambre.
Guterres aseguró que, en la actualidad, lo importante es apoyar a Ucrania y proteger a los países más vulnerables del mundo, ya que «muchos países en desarrollo ya estaban presentando problemas para recuperarse del impacto económico que había causado la pandemia de covid-19». Además de la inflación, incremento de los tipos de interés y aumento de las deudas, el miembro de la ONU señaló que ahora su sumarán las facturas elevadas de los alimentos, la energía y los fertilizantes.
Como un ejemplo de la influencia que tiene el conflicto en la producción de alimentos, la ONU informó que solo Ucrania produce más de la mitad del trigo que usa el Programa Mundial de Alimentos (PMA), y su situación actual afecta directamente al abastecimiento de esta agencia. Mientras que, tanto los ucranianos como los rusos, conforman el 30% de los productores de aceite de girasol que se suministra a escala global