Destacado

Ciudadanía y Gobernabilidad

Tomada de PNGitem

Eglé Iturbe

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe, CEPAL, adelanta una consulta entre personas interesadas en la situación de la “Participación de la Gestión Ciudadana en la Gestión Institucional”. Los resultados de esta consulta se conocerán el 27 de octubre en un webinar especial para ello.

La CEPAL espera recabar ideas, experiencias y sugerencias de personas de todos los países de la región, que en diferentes formas se encuentren vinculadas a las instituciones públicas como funcionarios, exfuncionarios, estudiantes, profesores o investigadores.  El objetivo es que se inscriban para exponer sus planteamientos sobre cómo lograr instituciones con las siguientes características;

  1. Eficaces: capaces de resolver problemas.
  2. Intersectoriales: capaces de trabajar en conjunto o colaborar con varios sectores.
  3. Inter-nivel: Lograr efectiva coordinación entre diferentes niveles institucionales del Estado (nacional, regional y local).
  4. Inter-temporal: Coordinar planificación de corto, mediano y largo plazo, que trascienda un período de gobierno.
  5. Multi-actores: que involucren las múltiples partes interesadas.
  6. Valor público: Significativo, protegido y promovido por valores públicos deseados.

Para llevar adelante esta actividad, la CEPAL elaboró cinco preguntas claves que serían la guía de los interesados en el tema:

  1. ¿Cómo cree que los usuarios beneficiarios y clientes de una institución pública podrían participar en la gestión de la institución?
  2. ¿Cómo la participación se ha visto afectada por la pandemia y cómo debe abordarse para que no disminuya y aumente?
  3. ¿Cuáles son las principales dificultades para que no exista participación efectiva en gestión institucional?
  4. ¿Qué capacidades deben desarrollarse dentro de la institución para incentivar e involucrar a los ciudadanos en la gestión de una organización de la gestión pública?, y
  5. Si fuese director de un servicio público, ¿qué instancias de participación crearía y como las implementaría?

A continuación presentaré algunas ideas personales, basadas en mi experiencia de muchos años en el gobierno, en todos los niveles de la administración pública, que me han permitido participar durante los gobiernos democráticos en la facilitación de  la consulta con los ciudadanos, a través de numerosos grupos de trabajo, comisiones de consulta y de elaboración de proyectos de leyes y normativa, trabajo en equipo con otros ministerios; a nivel regional y eventualmente a nivel local , teniendo como base una guía de visión de mediano y largo plazo, como los nueve Planes de la Nación,  que se diseñaron e implementaron parcialmente, desde 1960 hasta 1998.

Antes era imprescindible que la institución tomara la iniciativa sobre un tema o diseño de política en cuestión y seleccionara a quiénes debía convocar para trabajar; se privilegiaba a los grupos organizados de empresarios, trabajadores, universidades e investigadores, conjuntamente con los funcionarios responsables del diseño de las políticas públicas en los despachos involucrados y era importante la conducción por parte de un representante autorizado del organismo promotor de la reunión. Hoy en día, cualquier grupo privado no especializado, sino  interesado en los temas de discusión puede promover un foro, taller o conversatorio y con seguridad logrará la participación de las autoridades correspondientes.

En los actuales momentos hay dos elementos importantes que han cambiado la forma de comunicarse entre el ciudadano y las instituciones:

 La primera, son las muchas y más nuevas herramientas de trabajo que permiten lograr una más rápida y amplia colaboración que debe aprovecharse ampliamente para lograr los acuerdos necesarios y la mayor participación de las partes interesadas.  Hasta finales de los noventa, era necesaria la presencia física de los funcionarios de alto nivel en las reuniones para discutir y analizar cualquier tema que requiriera la participación de varias personas para diseñar o aplicar una política; hoy en día, basta con contar con internet y un computador o laptop, para participar en todos los foros temáticos desde la casa y aportar las ideas de preferencia a los ponentes o responsables. Herramientas como Zoom y Bluejeans, por ejemplo, son adecuadas para avanzar en estas actividades y se están usando a diario.

La segunda, es la pandemia del COVID-19 que ha cambiado rotundamente las formas de trabajar, de educar y de cuidar la salud, obligando a que el trabajo se realice en casa o suprimiendo labores que no se consideren necesarias o importantes, reduciéndose el empleo fijo y aumentando el empleo informal en casi todas las actividades que lo permitan.

Estas situaciones están causando nuevas formas de comunicarse con las instituciones; ya no es necesario ir a la oficina a organizar una reunión o proponer una política, puede hacerse por vía digital y recabar de esta forma las diferentes opiniones de los funcionarios y personas interesadas. En el caso de los servicios insuficientes por deficiencias de las instituciones prestadoras de los mismos, se ha originado la creación de grupos de usuarios defensores de sus derechos, que reclaman a diario las situaciones de déficit de agua, apagones de muchas horas y hasta de días, falta de gas para cocinar y gasolina, y diésel para el transporte de personas y alimentos. Aunado a ello, han surgido organizaciones privadas prestando los servicios que el Estado ya no quiere o puede proveer. Han surgido empresas que venden plantas eléctricas, camiones que abastecen de agua los tanques de casas y edificios, empresas que suplen bombonas de gas y bachaqueros de gasolina y diésel para evitar las colas en las estaciones de servicio.

Una nueva actividad comercial se ha intensificado. “el delivery” (envío de compras a la puerta de la casa): ropa, calzado, comidas, bebidas, entre otras. También se han intensificado otros  servicios privados: exámenes médicos, asistencia médica y  veterinaria, transporte personal,  mercaditos locales en urbanizaciones y barrios, en días específicos, y más.

La pandemia y las nuevas herramientas han ayudado e incentivado la privatización de los servicios públicos y las instituciones de la administración pública se están desmantelando, abandonando muchas de sus labores y el diseño de las políticas públicas. Es necesario retomar la importancia de las instituciones  y la capacitación y selección de los funcionarios públicos, para adoptar nuevas formas de trabajo eficiente, coordinadas, en todos los sentidos, con los interesados y los ciudadanos para garantizar la gobernanza.

Espero que la CEPAL pueda recabar muchas y muy interesantes y avanzadas ideas de esta experiencia, y proponer algunas políticas novedosas para la región.

Deja un comentario